La Comunidad del Cristo dice adiós a la Madre.
Por: Ahmed A. Puig Lamela y Pablo M. Marrero Álvarez
Camagüey, febrero 26 (9:00 a. m.) Al terminar la velada cultural, la bendita imagen de la Virgen de la Caridad, permaneció expuesta a la veneración en la entrada principal del templo, hasta el momento de acción de gracias de la misa que se inició a las diez de la noche del día de ayer. En esta misa oficiada por el presbítero Francisco García, Paquito, recibieron el sacramento del bautismo once catecúmenos, se celebraron quince primeras comuniones y cinco matrimonios.
Las puertas de la iglesia del Santo Cristo del Buen Viaje, permanecieron abiertas durante toda la madrugada, acogiendo a las personas que se acercaron.
Al amanecer, José Manuel Téllez, engalanado con su traje de mariachi, entonó a la Virgen el tradicional canto de Las Mañanitas. El mariachi nos compartió que estaba muy emocionado, pues, era lo más grande que le había ocurrido en toda su vida y lo más bonito de sus once años de carrera artística. Luego, la señora Marcela Hernández, fue la encargada de animar el rezo del rosario de la aurora. A las siete de la mañana, se inició la misa de despedida a la Imagen, presidida por Mons. Wilfredo Pino Estévez, obispo de la diócesis de Guantánamo-Baracoa y fue ofrecida en sufragio por las almas de los difuntos, cuyos nombres, fueron colocados en una cesta ubicada junto al altar.
Después de la misa, la imagen de la Virgen de la Caridad fue llevada en hombros hasta el carro en el que se transporta y puertas afuera del templo, la rumba de Quintín, junto a una muchedumbre de la barriada del Cristo, acompañó a la Mambisa hasta la cercana iglesia del Carmen.
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